La cirugía refractiva con láser permite al paciente dejar de ser dependiente de sus lentes mejorando así su calidad de vida.
La técnica Trans-PRK permite operar al paciente en menos tiempo, con más precisión y mayor exactitud que otras técnicas empleadas consiguiendo mejores resultados. Durante la cirugía el láser realiza un tallado sobre la córnea sin necesidad de realizar cortes en el ojo con bisturí o navajas.
La edad ideal para realizar este tipo de cirugías es a partir de los 21 años siempre y cuando la graduación haya permanecido estable durante al menos los dos últimos años.
La cirugía no necesita anestesia general, aunque en algunos casos se puede usar sedación para que el paciente esté más tranquilo. El procedimiento es muy rápido, no más de 10 minutos en el quirófano, y se operan ambos ojos a la vez.
el tiempo de recuperación puede variar según el paciente, pero en la mayoría de los casos pueden volver a sus actividades normales en poco tiempo.